Ballard se describe a sí mismo como un abolicionista de hoy en día y está haciendo todo lo posible para educar al público sobre la plaga, a veces poco reconocida, de la trata de personas en la sociedad.
Timothy Ballard, mormón y fundador de Operation Underground Railroad quien se infiltra en el peligroso mundo de la trata de personas, se ha convertido en un faro para el cambio y un héroe para cientos de niños de todo el mundo que han sido rescatados debido a sus acciones valerosas y fe inquebrantable.
NOTA: En este artículo se aborda la atrocidad de la esclavitud sexual infantil, una de las industrias criminales de más rápido crecimiento y más lucrativas en el mundo de hoy. Aunque se ha evitado en todo lo posible para evitar el lenguaje gráfico, este artículo podría ser molesto para algunos lectores.
En una tarde de febrero en el pobre país de Haití, Timothy Ballard se tira al suelo y es esposado por la policía local. Levantando la cabeza del asfalto, ve como la mujer que acababa de venderle dos niños pequeños, un hermano y una hermana de 2 y 3 años respectivamente por $ 15,000 cada uno es arrastrada por la policía.
La mujer detenida no sabe o no tiene ni idea de que Ballard es un ex agente de la CIA y del Departamento de Seguridad Nacional que está trabajando con el gobierno de Haití en una operación encubierta que liberaría a 28 niños de su “orfanato”. Poco sabía ella que Ballard venía de rescatar a más de 200 niños de los traficantes de personas solamente en el año 2014.
Ballard se describe a sí mismo como un abolicionista de hoy en día y está haciendo todo lo posible para educar al público sobre la plaga, a veces poco reconocida, de la trata de personas en la sociedad.
“Nos ocupamos de nuestra vida pensando que hemos erradicado la esclavitud, pero este problema está más grande que nunca”, dice. “Hoy en día hay más esclavos que todos los esclavos en los 300 años de la trata transatlántica de esclavos”. De hecho, las organizaciones de derechos humanos coinciden en que hay al menos 21 millones de víctimas de la trata de personas en el mundo hoy en día, incluyendo 2 millones de niños. El rescate de estos niños se ha convertido en la misión de Ballard en su vida, una misión que cree que está inspirada por el Señor.
En la oscuridad
“No ingresé a este tipo de trabajo de manera heroica o con la espada desenvainada”, aclara. “Entré pataleando y gritando.”
Como un agente del gobierno, Ballard fue entrenado para luchar contra el terrorismo, por lo que se sintió sorprendido cuando su jefe le pidió específicamente que le ayudara a formar una unidad de delitos menores.
“Le dije que no”, recuerda. “Es la única cosa que yo no haría. Es la peor cosa posible que cualquiera puede ver. ¿Quién sabe cómo eso me podría afectar?”.
Pero su jefe insistió, afirmando en que la fe mormona de Ballard le ayudaría a sentirse fortalecido ante los horrendos crímenes que tendría que enfrentarse.
“Sentía que mi formación religiosa sería una protección para mí”, indicó Ballard.
Después de ayunar y orar con su esposa, Katherine, la pareja estaba convencida de que la respuesta fue “sí”. “La misma razón por la que dije que no al principio es la razón por la que llegamos a la decisión de decir sí, porque tenemos niños”.
De esta manera Ballard comenzó su trabajo como un personal operativo encubierto que asumió el papel de pedófilo o traficante de niños. No pasó mucho tiempo después de su primer caso, que llevó al rescate de un niño de 5 años de edad, que de nuevo lo puso en duda si podría soportar la carga emocional, psicológica y espiritual del problema.
“Este niño estaba siendo violado de la peor manera posible”, recuerda. “Yo fui el primer agente en la escena, y él saltó a mis brazos y no lo solté. Tras llegar a casa esa noche, me derrumbé en el suelo y lloré como un bebé”.
Ballard continúa: “Le dije a mi esposa: yo no puedo hacer esto. Estos niños son secuestrados y violados. No hay nada peor en la tierra. No hay nada peor en el infierno”. Sin embargo él sentía una confirmación poderosa de que esto era lo que tenía que hacer. “Hice un compromiso con Dios y con ese niño, de que iba a hacer todo lo posible por ayudar a niños secuestrados, incluso si esto me costara la vida.”
Y exactamente eso fue lo que hizo durante los siguiente 12 años.
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Inspiración Divina
Como un agente del gobierno, Ballard sólo podía trabajar los casos, si un ciudadano estadounidense estuviera involucrado. “Hay recursos limitados”, explica. “No culpo al gobierno, es simplemente la manera que es”.
Ante esa situación, la frustración de Ballard se hizo insoportable cuando se infiltraba en redes de tráfico de niños, para luego tener que ser forzado a dejar atrás a muchas víctimas inocentes.
“He tenido casos en que yo conocía donde estaban los niños, pero que no podía sacarlos porque no había ninguna relación con los Estados Unidos”, dice. “No podía soportarlo más”.
Y continúa: “Tuve varias experiencias espirituales muy profundas que me dejaron claro de que yo iba a hacer algo más en este campo. Empecé a tener sentimientos poderosos de que mi familia necesitaba dejar California y mudarnos a Utah, pero no teníamos ni idea de por qué nos íbamos a ir”.
De esta manera Ballard y su esposa fueron al templo para recibir orientación. A la mañana siguiente, en lo que Ballard describe como una “descarga espiritual”, recibió una respuesta clara e innegable: “Encuentra los niños perdidos”.
“Yo sabía exactamente lo que tenía que hacer. Yo iba a encontrar a esos niños que estaban fuera de nuestro alcance jurisdiccional iniciando una organización privada, sin fines de lucro. No sabía cómo, pero algo en Utah me llevaría a lograrlo”.
La familia se mudó a Utah en el verano de 2012, y pronto todo encajó en su lugar para Ballard, fundó Operatión Underground Railroad, organización que se especializa en el rescate de niños atrapados en la esclavitud.
“Antes de salir del gobierno, llamé a todos mis contactos en otros países. Les pregunté si estarían dispuestos a todavía dejarme entrar y operar de forma privada, y todos dijeron que sí”.
De esta forma, el también padre de seis niños, reunió un equipo de ex Navy Seals, ex agentes de la CIA, y otros agentes con habilidades únicas. A pesar de no saber de dónde vendría el dinero, trabajo en red y el boca a boca permitió que rápidamente obtuvieran donaciones suficientes para comenzar a operar en enero de 2014.
“A pesar de que el dinero estaba llegando, me sentí como Jonás – Yo quería correr y esconderme. Pero llegó el punto de que tan duro como fue andar por este camino desconocido, teniendo que convivir con situaciones aterradoras. Me quedaba petrificado ante la idea de estar ante el Señor y tener que explicarle por qué no hice lo que él me había pedido”.
Estrategia Espiritual
El equipo de Ballard se compone de personas de todas las religiones, pero muchos son SUD, incluyendo un amigo de la infancia y ex Navy Seal de Holanda, quien se desempeña como vicepresidente de Operaciones de Rescate.
El ex diplomático estadounidense y oficial de inteligencia Matt Osborne, quien se desempeña como vicepresidente de Misiones Extranjeras e Inteligencia en la organización, es también mormón. De hecho, Osborne se unió a la Iglesia hace dos años debido a su amistad con Ballard en la universidad. “En una oportunidad Tim me dio su testimonio y plantó la semilla”, dice. “Investigué intermitentemente por más de una década antes de poner a prueba la promesa de Moroni, luego la respuesta fue más que abrumadora”.
Esa misma convicción de corazón de Ballard fue lo que convenció a Osborne para dejar atrás una carrera estelar en el gobierno y pasar a unirse a la Operatión Underground Railroad. “Había algo en lo que dijo y la forma en que lo dijo,”Osborne recuerda. Al final del día, todo lo que te podré decir es que haremos esto por la única razón de hacer el bien. Eso es lo que finalmente me llevó a aceptar”.
Según Osborne, tener un equipo de personas sinceramente humildes y justos, han hecho la diferencia. “Oramos constantemente”, dice. “Oramos por la protección. Oramos por guía para encontrar a los niños, oramos para encontrar funcionarios de gobierno honestos en otros países. Es muy difícil saber en quién confiar”.
“No somos un grupo de vigilantes, y nunca trataremos de forzar las cosas”, dice Turley. “Hacemos todo lo que podemos, pero las cosas van a pasar en el tiempo del Señor que es la más productiva”. “Algunos de los momentos más espirituales de mi vida han ocurrido mientras estaba sentado a la mesa, frente a un traficante de niños”, dice Ballard. “Siento que el Espíritu está conmigo en esos momentos de completa oscuridad”.
Tres operaciones exitosas en Colombia
El equipo de Ballard encontró un enorme éxito en casi una docena de operaciones el año pasado, pero el mayor logro de la Operatión Underground Railroad ocurrió en el 2014, cuando en el mes de octubre, en cooperación con el gobierno colombiano, ejecutaron la más grande operación contra la trata de personas hasta la fecha en dicho país.
“Hemos realizado tres operaciones con solo una hora de diferencia en tres ciudades de Colombia: Cartagena, Armenia y Medellín”, dice Osborne. “Estas operaciones dieron como resultado el rescate de 123 víctimas y la detención de una docena de delincuentes. Los traficantes [en cada ciudad] no estaban conectados, pero queríamos detenerlos al mismo tiempo, de esta manera podíamos mantener el elemento sorpresa”.
Ballard, quien sirvió una misión en Chile y habla español con fluidez, participó en la operación de Cartagena, frente a la costa de las Islas del Rosario. En una labor dramática, se hizo pasar por un empresario estadounidense que quería alquilar una casa en la playa y realizar una gran fiesta para sus amigos con niños para su “entretenimiento”.
Al inicio, Ballard había acordado con los traficantes llevar a 20 niños por $ 300 cada uno. Fue durante dichas gestiones que se enteró de que los traficantes querían construir un hotel sexual infantil en la isla, de esta manera, vio la oportunidad de rescatar a 30 niños más. Fue así que Ballard pidió a un amigo en el negocio de bienes raíces, para que se haga pasar por un inversor potencial.
“Mark * (el nombre ha sido cambiado) es un exitoso magnate de bienes raíces. Él puede hablar de negocios de este tipo, así que sabía que sería perfecto para dicha misión”, dice Ballard. “Le dije a los traficantes que me tendrían que proporcionar el mejor “entretenimiento” ya que mi amigo Mark estaría interesado en invertir, por lo que pedí a los traficantes que lleven a todos los niños que tenían a la fiesta, incluso a los que todavía estaban ‘preparando’, para la vida en el comercio sexual. “Esto incluía cuatro vírgenes como de 11 años de edad, los cuales tenían un precio muy fuerte, algo de $ 1.000 cada uno.”
El negocio fue aceptado, los niños fueron llevados en barco a la isla. Se pusieron cámaras ocultas para obtener las pruebas fehacientes del acto ilícito, se grabó el momento de cuando el dinero cambiaba de manos, era el momento para que un agente de Colombia diera la señal para hacer cumplir la ley. Pero había un inconveniente.
“Se suponía que los agentes debían asaltar la playa cinco minutos antes de la señal, pero tardaron 45 minutos para llegar allí”, recuerda Marcos. “Pensé, ¿qué se supone que debo hacer ahora? es hora de que el partido comience.”
En un esfuerzo por detener a los traficantes y mantenerlos en la mesa, comenzó a interesarlos con la elaboración de un plan de negocios para su hotel. “Justo en la parte superior del papel, donde había escrito el costo de un niño. Era repugnante”, dice. “Pero funcionó. Al final, ellos discutían sobre quién se quedaría con qué porcentaje”.
Luego de ello, 30 agentes colombianos llegaron a la playa y tomaron por asalto la casa.
Una de las partes más difíciles para los agentes encubiertos es resistir la tentación de consolar a los niños. En su lugar, ellos deben permitir que los niños crean que son pedófilos para mantener la integridad de la misión.
“Cuando sucede la emboscada, quedamos detenidos junto con los traficantes para que y así mantener nuestra imagen para una próxima misión”, dice Osborne.
En este caso, sin embargo, alguien fuera del equipo les dijo a los niños quienes en el operativo eran los buenos, y cuando el equipo de Ballard dejó la isla, ellos podían escuchar a los niños gritando, cantando y riendo. “Fue muy emotivo”, dice Osborne.
“Derramamos muchas lágrimas. Fue una tierna misericordia de que el Señor permitiera a Tim tener esa conexión con estos niños en su última misión secreta. “(Ballard y Turley decidieron terminar su trabajo como agentes encubiertos para que puedan traer más conciencia a la población sobre la esclavitud moderna y así recaudar más donaciones para el funcionamiento del Operatión Underground Railroad, pero continúan involucrados detrás de las escenas de cada misión de rescate).
Tres meses después de la Operación, Ballard volvió a las calles de Colombia y comenzó a preguntar a traficantes locales si le podían vender a un niño en la noche. “Me dijeron: ¿No lo sabes? Nadie va a venderle niños ahora. Es demasiado peligroso”. “Hemos creado un enorme elemento disuasivo para los traficantes y ha asustado a los viajeros de turismo sexual infantil”, explica. “Hemos sacudió a todo el país.”
Desde octubre, Colombia ha completado cinco operaciones independientes, y eso es exactamente lo que Operatión Underground Railroad espera en cada país. “Nuestro objetivo es trabajar con estos gobiernos, enseñarles lo que necesitan saber, y mostrarles que pueden hacer esto para que tengan la confianza de hacerlo sin nosotros”, dice Turley. “No podemos salvar a todos, pero a medida que más países se unan en la lucha, podemos hacer una gran diferencia”.
Una vida de libertad
Las misiones de rescate no terminan en la detención de los traficantes; una gran cantidad de atención se ofrece a los niños después de que son liberados.
“La parte más importante de la operación es la rehabilitación de los niños”, dice Osborne. “Nos asociamos con organizaciones que son expertos en eso, así como con orfanatos de renombre y con experiencia de años, por lo que cuando los niños son rescatados tendrán un lugar seguro a donde ir”.
Por desgracia, en muchos casos, son los mismos familiares quienes vendieron a estos niños a la esclavitud, por lo que no podrán regresar a casa. Queremos mantener la red de seguridad tan firmemente como sea posible para las víctimas y así ellos nunca regresen a esa forma de vida”.
“Cada niño es precioso”, dice. “No podemos resolver este problema durante la noche, pero sólo salvando aunque sea a un niño, podemos devolverles la vida que Dios quería para ellos.”
En cuanto a los pequeñas hermanos “comprados” por Ballard en Haití en febrero pasado, los padres de los niños no pudieron ser localizados o identificados. Ballard no podía soportar dejarlos atrás, así que él y su esposa están en el proceso de adopción.
“Ellos ya son parte de nuestra familia”, dice.
Un faro para el Cambio
Además de realizar operaciones de rescate en todo el mundo, el equipo de Ballard está desarrollando un software que hará un seguimiento de la pornografía infantil y la aplicación de la ley a los pornógrafos.
“El problema de la esclavitud sexual infantil es 100 por ciento consecuencia del mundo de la pornografía”, explica Ballard. “La pornografía es una droga. La pornografía de adultos es la marihuana, y la pornografía infantil es la cocaína. Cuando la gente se mueve a la pornografía infantil, con el tiempo quieren que la cosa sea real. Este software va a cambiar todo”.
Hasta mediados del 2015, la Operatión Underground Railroad ha llevado a cabo misiones de rescate en Haití, Guatemala, Colombia, República Dominicana, México, Nicaragua, Costa Rica, Tailandia y los Estados Unidos, pero de acuerdo a Ballard, esto es sólo el comienzo.
“Hemos estado recibiendo solicitudes de los gobiernos de todo el mundo”, dice. “Tenemos varios asuntos pendientes, así que nunca se sabe cuándo vamos a tener que subirnos a un avión. Podría ser mañana. Me siento apoyado, incluso mi esposa ni siquiera se queja, ella sabe que esto es lo que se supone que debemos hacer.”
“Lo único que se interpone para que el mal deje de hacerse cargo de este mundo es que la gente buena se enfrente a sus miedos y tome medidas”, dice Mark. “Las personas que no hacen nada, permiten a los malos florecer. No puedo sentarme y permitir que atrocidades como estas sucedan. Yo no voy a permitir que mi miedo me impida hacer lo que es correcto”.
Para hacer una donación a Operatión Underground Railroad o aprender más sobre la organización, visite ourrescue.org
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Como puedoser parte de esto
ResponderBorrarQue el Senor siga derramando sus bendiciones sobre usted y todos los que laboran con usted.
ResponderBorrarFelicitaciones a todos!!! Leer esto es una bendición para nuestras vidas y paz y alegría para los niños rescatados. Ojalá que en el mundo se sumen más personas que quieran ser como ustedes. Pues pueden contar conmigo!!
ResponderBorrarun buen hombre
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