En la historia de la Iglesia ha habido momentos únicos de revelación que ha venido a través de visiones, sueños, o sensaciones que manifiesta el Espíritu. Este es otro caso en que la revelación vino de boca del profeta recientemente fallecido.
El 17 de agosto de 1845, 14 meses después de que José fuera asesinado a balazos en la cárcel de Carthage, Brigham Young escribió sobre un sueño en el que José se le apareció para aconsejarlo a animar fuertemente a la gente para terminar el Templo de Nauvoo. Brigham escribió: "Esta mañana soñé que vi a mi hermano José Smith y mientras trabajaba en mi negocio dijo: 'El hermano Brigham no tiene prisa'; esto se repitió la segunda y la tercera vez, cuando llegó en un grado de nitidez".
El 23 de febrero de 1847, Brigham Young estaba en Winter Quarters haciendo planes para que el grupo pionero de vanguardia llegara al Valle de Salt Lake. Brigham escribió sobre un sueño en el que se le apareció el profeta José. Brigham Young le contó a José cuánto echaba de menos su compañía, y le preguntó a José por qué no podía ir con él. José le dijo que tendría que esperar. Brigham luego preguntó si José tenía un mensaje para los Santos. José respondió:
‘Diga a los hermanos que sean humildes y fieles y se aseguren de mantener consigo el Espíritu del Señor, el cual los conducirá por el camino recto. Tengan cuidado y no rechacen la voz suave y apacible, ya que ella les enseñará lo que deben hacer y qué camino seguir; cederá los frutos del reino. Diga a los hermanos que mantengan sus corazones abiertos a la convicción para que cuando el Espíritu Santo venga a ellos, sus corazones estén listos para recibirlo. Ellos pueden discernir entre el Espíritu del Señor y los otros espíritus: les susurrará paz y gozo a su alma; alejará la malicia, el odio, la contienda y toda la maldad de sus corazones, y su único deseo será hacer el bien, llevar a cabo la rectitud y edificar el reino de Dios... Diga a los hermanos que si siguen al Espíritu del Señor, les irá bien’.
Como se puede observar, las manifestaciones se dieron en contextos clave, con el objetivo de animar al profeta actual y a los santos a avanzar con la obra del Señor. Los consejos fueron precisamente lo que más ayudaría en esas épocas de crisis.
Para ver las citas originales se mencionan las fuentes a continuación.
Fuentes:
"Secretary's Journal," 17 August 1845, Brigham Young Papers, MS, Church Archives
Manuscript History of Brigham Young, February 23, 1847
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