En un momento aparentemente definido por la división global y religiosa, la Iglesia continúa construyendo tradiciones de diálogo interreligioso y cooperación dentro de la comunidad de fe en Guatemala.
Por tercera vez, un representante de la Iglesia participó en la Convención Anual de la Comunidad Ahmadiyya Musulmana de Guatemala. El evento reciente fue organizado por los líderes musulmanes locales para promover la paz y la solidaridad en el país centroamericano y en todo el mundo.
Julio Alvarado, director de asuntos públicos de la Iglesia para el Área de América Central y ex consejero de la Presidencia del Área de América Central, aceptó la invitación para hablar en la reunión.
"La Iglesia [SUD] goza de una amistad con esta comunidad [interreligiosa] y compartimos con ellos la importancia de proteger la libertad religiosa", escribió Alvarado en un correo electrónico.
Abdul Sattar Kahn, presidente de la Comunidad Musulmana Admadia en Guatemala, dirigió la convención. Otros grupos religiosos que participaron en el evento incluyeron la Iglesia Católica y las congregaciones evangélicas locales.
En sus comentarios, Alvarado dijo que la libertad religiosa se cuenta entre los pilares fundamentales de la paz.
David González, de la comunidad musulmana guatemalteca, hizo una presentación y desafió a los participantes a trabajar juntos para garantizar la paz y la libertad religiosa. También señaló los muchos proyectos humanitarios patrocinados por su comunidad, incluidos los proyectos de agua y las iniciativas de salud y educación.
Al cierre de la convención, el participante Azhar Haneef agregó que la libertad religiosa es esencial para la sociedad. La libertad de creer, o de no creer, debe ser respetada por todas las creencias religiosas.
Alvarado escribió que la Iglesia es reconocida y respetada en Guatemala por sus esfuerzos continuos para promover la libertad religiosa y la tolerancia.
"En muchas de nuestras actividades, hemos invitado a líderes religiosos de otras denominaciones, y han expresado su gratitud a la Iglesia por promover la libertad religiosa y el fortalecimiento de la familia", escribió. "Muchos aquí nos consideran una Iglesia que promueve la paz y la fraternidad".
Hablando en la convención musulmana anual, agregó, "fue una experiencia edificante... Espero que nos inviten de nuevo".
La Iglesia ha tenido un papel influyente en la comunidad religiosa guatemalteca durante décadas. La nación centroamericana alberga más de un cuarto de millón de miembros, dos templos (en Ciudad de Guatemala y Quetzaltenango) y seis misiones.
Temas
Varios
Comenta con Facebook