Las personas que no son miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días a menudo asocian nuestra religión con una larga lista de reglas que seguimos. Si bien la Iglesia tiene muchas pautas para nuestra protección y felicidad en general, es importante entender qué es una doctrina verdadera y cual no lo es.
1. Las reuniones de la iglesia se llevan a cabo solo el domingo
El domingo se dedica a la adoración, la familia y el descanso para la mayoría de los Santos de los Últimos Días en todo el mundo. Sin embargo, algunos países dedican otros días a la adoración. Por ejemplo, algunos países en el Medio Oriente llevan a cabo sus reuniones de la iglesia el día sábado.
Cuando se le preguntó dónde se llevan a cabo con mayor frecuencia reuniones de la iglesia por los Santos de los Últimos Días, Deseret News informó: “Melissa Inouye, de la Universidad de Hong Kong, cree que la respuesta está en Hong Kong, donde las reuniones de la iglesia se llevan a cabo todos los días de la semana a fin de adaptarse a los trabajadores empleados domésticos, muchos de los cuales son de Filipinas y que solo tienen un día a la semana libre, y estos días varían".
2. Los Santos de los Últimos Días no pueden usar el control de la natalidad
El ser padres es una bendición y un privilegio en el que muchos Santos de los Últimos Días pueden formar parte. Los hijos son un gozo en el hogar y se nos manda a "multiplicar y henchir la tierra". Sin embargo, esta responsabilidad sagrada es diferente para cada familia y para cada pareja... El número de hijos en una familia o en qué momento los deben tener es estrictamente un asunto entre el esposo, la esposa y el Señor.
El presidente Dallin H. Oaks dijo : “Muchos padres [Santos de los Últimos Días] tienen familias numerosas. Otros lo intentan pero no son bendecidos con hijos o con la cantidad de hijos que desean. En un asunto tan íntimo como este, no debemos juzgarnos unos a otros".
3. Las mujeres Santos de los Últimos Días no lideran en la Iglesia
Muchas personas piensan que las mujeres en la Iglesia no tienen responsabilidades de liderazgo, pero eso simplemente no es cierto. Las mujeres desempeñan un papel clave en la Iglesia al dirigir los programas de la Sociedad de Socorro, Mujeres Jóvenes y la Primaria. Discursan en la reunión sacramental y se ministran mutuamente de una manera amorosa y cuidadosa mientras se sintonizan con las necesidades de los miembros de su barrio. Los hombres y las mujeres tienen diferentes responsabilidades en la iglesia, pero son complementarias, lo que da como resultado un barrio bien organizado y equilibrado.
4. Los Santos de los Últimos Días no pueden hablar de nuestra Madre Celestial
Creemos en un Padre Celestial a quien oramos, le adoramos y agradecemos nuestras bendiciones. Él es perfecto y nos ama profundamente. Hablamos de Él a menudo en la Iglesia, lo que deja una pregunta abierta para muchas personas acerca de si también tenemos una Madre Celestial.
Los profetas y los líderes de la Iglesia han hablado de Su existencia en sus enseñanzas y hay registros de José Smith enseñando a algunas de las mujeres en la Iglesia acerca de Ella.
El presidente Harold B. Lee enseñó : "Olvidamos que tenemos un Padre Celestial y una Madre Celestial que, probablemente, están incluso más preocupados por nosotros que nuestro padre y madre terrenal, y esa influencia del cielo está obrando constantemente para tratar de ayudarnos cuando hacemos todo lo que podemos." El presidente M. Russell Ballard hizo eco de sus palabras: "Somos parte de un divino plan diseñado por Padres Celestiales que nos aman".
El presidente Hinckley enseñó que aunque oramos a nuestro Padre celestial, "El hecho de que no oremos a nuestra Madre Celestial de ninguna manera disminuye ni denigra la importancia que ella tiene".
5. Los Santos de los Últimos Días no pueden tomar cafeína
A José Smith se le dio la revelación que conocemos como la Palabra de Sabiduría en 1833. Está registrada en D. y C. 89 y aconseja a los Santos de los Últimos Días contra el consumo de tabaco, el consumo de alcohol y las "bebidas calientes", específicamente el té y el café. El resto queda a criterio personal. El élder Boyd K. Packer declaró : “La Palabra de sabiduría fue 'dada como un principio con promesa' ( D. y C. 89: 3 )... un principio es una verdad perdurable, una ley, una regla que se puede adoptar como una guía para tomar decisiones".
Conozco a algunos maravillosos Santos de los Últimos Días que evitan los refrescos o gasesosas con cafeína y conozco a otros que disfrutan de una buena Coca Cola Light (incluyéndome a mí). La decisión de consumir bebidas con cafeína es entre usted, el Señor y lo que siente cómodo de hacer.
6. Los Santos de los Últimos Días se salvan solo a través de las obras
Creemos de todo corazón que lo que hacemos con nuestro tiempo en la tierra es importante. Se nos alienta a obtener una educación, trabajar duro, enseñar a nuestros hijos a trabajar duro y servir a los demás con un corazón dispuesto. Sabemos que nuestras obras nos ayudarán a obtener la vida eterna, pero sabemos que no seremos salvos solo a través de nuestras obras. Necesitamos la gracia y el perdón. Necesitamos la expiación de Jesucristo.
Lds.org afirma: “No ganamos la salvación. Nuestro Padre Celestial y el Salvador nos bendecirán con vida eterna, a través de Su gracia, si nosotros hacemos nuestra parte. Ellos nos han pedido que tengamos fe en Jesucristo, que nos arrepintamos a lo largo de nuestras vidas, que seamos bautizados y recibamos otras ordenanzas, y que perseveremos fielmente hasta el fin. Si hacemos eso, se nos promete la vida eterna a través de la gracia de Dios".
Estas enseñanzas inspiradas nos brindan la orientación y la dirección necesarias para volver a vivir con nuestro Padre Celestial, y asegurarnos de que entendemos la doctrina de la Iglesia que nos ayudará a llegar a vivir con Dios.
Fuente: ldsliving
Comenta con Facebook