Un misionero recuerda el bautismo del acusado por asesinato en el caso MacKenzie Lueck que ha estado en las noticias los últimos días en Salt Lake City, Utah. Si bien dejó de ser misionero regular, en tal época lo era.
Casi diez años antes de que Ayoola Ajayi fuera acusado de matar a una estudiante de la Universidad de Utah, Logan Dill dice que fue bautizado en La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
Dill, entonces misionero en el campus de la Universidad Estatal de Utah, dice que Ajayi era nuevo en el país y mostró un gran entusiasmo por las enseñanzas de la iglesia. Y la iglesia correspondió.
"Al no ser de los Estados Unidos, no saber inglés bien, creo que fue genial que encontrara amigos instantáneos, la gente fue muy amable con él", dijo Dill.
Dill bautizó a Ajayi en octubre de 2009. Tiene extensas reflexiones sobre la historia de la conversión de Ajayi en un diario muy desgastado, pero ahora la visión retrospectiva es cualquier cosa menos perfecta.
"Espero no parecer ingenuo, ¿sabes? Realmente siento que era como una persona genuina", dijo.
Cuando aparecieron los titulares por primera vez con el nombre de Ajayi relacionado con el asesinato de MacKenzie Lueck, de 23 años, Dill no podía entenderlo.
"Simplemente no puedo imaginarlo haciendo algo así", dijo.
Logan conocía a Ajayi simplemente como "Alegría" (Joy en inglés, pronunciado "Yoi") durante su tiempo juntos en el norte de Utah.
"Es difícil decir su nombre, así que quería elegir un nombre estadounidense fácil y parecido, así que fue Joy", dijo.
Los dos hombres eran amigos durante los primeros días de Ajayi en la comunidad SUD, pero Dill regresó a su Oklahoma natal al final de su misión de dos años y, finalmente, los dos perdieron contacto. Perdieron la comunicación en 2012.
"Debido a que yo era ese misionero, ya sabes, por la iglesia que estuvo allí para su conversión, tengo tantos remordimientos porque desearía haber mantenido un mejor contacto con él", dijo el ex-misionero a la prensa.
Está increíblemente triste por la muerte de Lueck y la posibilidad de que su amigo pueda ser responsable. Luchó por encontrar palabras para la familia de Lueck.
"Les diría que lamento tener tantas cosas buenas que decir sobre Joy porque esa es la persona que conocía", dijo. "Realmente me gustaría averiguar qué bifurcación existió en su camino, qué decisión tomó, porque la tomó como en 180 grados".
Esta noticia nos hace reflexionar sobre lo necesario que es mantenernos rectos en nuestro proceso de conversión, alejándonos de todo mal. La doctrina verdadera no garantiza nada, a menos que sigamos aferrados a la fe cada día de nuestra vida.
Según varios portales Ayoola Adisa, acusado de asesinar y quemar el cuerpo de la estudiante de Utah, MacKenzie Lueck, pidió a un contratista erigir un habitáculo insonorizado, con acceso por huella dactilar, y ganchos en las paredes.
La familia de la joven puso estos carteles por la ciudad, reportando su desaparición:
Ayoola Adisa, nacido en Nigeria, enfrenta ahora cargos por asesinato agravado, secuestro agravado, profanación de un cadáver y obstrucción a la justicia. Se encuentra recluido en la prisión del condado de Salt Lake sin posibilidad de salir en libertad bajo fianza.
Fue detenido el viernes después de que un equipo SWAT armado rodeara su casa en el número 1028 S de West Temple. Ese mismo día, los investigadores hallaron en el jardín trasero del acusado "tejido humano femenino", que según los exámenes forenses coincidió con el ADN de la estudiante desaparecida.
Fuente: Utah TV
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