En la era de "estar seguros, quedarse en casa", un grupo de estudiantes universitarios ha emprendido un esfuerzo para ayudar a la población más vulnerable a mantenerse saludable al ofrecer un servicio para obtener lo que más necesitan: alimentos.
"Las personas que están sanas y están tomando precauciones para no transferir enfermedades de ningún tipo están dispuestas a ayudar", dijo John Lindsay, un estudiante de la Universidad Brigham Young que estaba buscando una manera de mantenerse involucrado en su comunidad después de que su escuela comenzara las clases en línea y de que el gobernador ordenara a todos a quedarse en casa.
"Ha sido increíble", dijo Lindsay sobre la respuesta de la comunidad al grupo que él inició, el Equipo de Respuesta COVID-19 del Valle de Utah.
Es un servicio de entrega de víveres para aquellos que se quedan en casa por razones de salud durante la pandemia mundial. Comenzó hace un par de semanas con tres personas en el condado de Utah y desde entonces se ha convertido en más de 80 voluntarios en dos condados.
"Recibí mensajes de texto y llamadas de personas de todo el mundo que simplemente decían:" Vi a tu grupo al que quiero ayudar", dijo. Summer Schmoekel fue una de esas personas que se acercó.
"Una buena manera de pasar parte de mi tiempo extra que tengo en este momento", dijo Summer, quien descubrió que tenía más tiempo después de que terminara la escuela y se pospuso su pasantía.
Se inscribió para ser voluntaria el jueves y luego se encontró yendo a la tienda a favor de una pareja de ancianos que no conocería sino hasta el viernes.
"A ella realmente le preocupa que su esposo (anciano) vaya a la tienda de abastecimientos", dijo Summer.
Summer recibió el mensaje el jueves por la noche acerca de la pareja que necesitaba ayuda para comprar sus alimentos. Recibió la lista por teléfono y luego se puso su máscara y agarró un carrito de compras para comenzar a comprar.
"Tuve que firmar un montón de exenciones para asegurarme de que estaba siguiendo las pautas de los CDC y ese tipo de cosas", dijo. Después de comprar la mercadería, los entregó al porche delantero de una casa cercana y luego procedió a descargar todas las mercancías, limpió cada una de las bolsas con toallitas Clorox, luego hizo lo mismo con cada uno de los artículos antes de colocarlos de vuelta en las bolsas.
Lindsay dijo que la mayoría de las personas reembolsan a los voluntarios los comestibles a través de Venmo o ApplePay. En este caso, la pareja tampoco las usó, así que escribieron un cheque, lo dejaron en el suelo y Summer lo recogió y lo limpió antes de partir en su automóvil.
"La gente que está cerca de 'hey, tal vez debería ir, tal vez no debería ir a la tienda, solo sé que hay personas que están ahí afuera que dirán' hey, haremos eso por ti, ” dijo Lindsay.
Dijo que han logrado recaudar algo de dinero para la causa y están recolectando donaciones que se utilizan para imprimir volantes para colgar en los vecindarios para aquellos que pueden no ver el servicio disponible a través de un teléfono inteligente. También usan el dinero recibido para comprar bienes esenciales como toallitas y desinfectante Clorox, si están disponibles.
Lindsay dijo que ofrecerán el servicio mientras dure la pandemia y mientras sea necesario.
"Esperemos que no mucho tiempo", dijo. "Pero aunque fuera mucho tiempo, tenemos personas que quieren ayudar".
Para solicitar su servicio, obtener más información o ser voluntario, puede contactarlos en Instagram o llamar o enviar un mensaje de texto al 801-598-3993.
También invitamos a todos en sus propias ciudades a crear o sumarse a este tipo de proyectos que sin duda harán un mundo cada vez mejor. Si tienes una idea de un posible proyecto sin fines de lucro puedes compartirla a contacto(arroba)enlacedefe.org
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